¿Qué es más fuerte que el amor? En Mystic Falls, lo más fuerte, lo que parece no resentirse lo más mínimo, es el odio. Puedes predicar al viento que amas a alguien y abandonarle al siguiente capítulo. Pero siempre habrá alguien a quién quieras estacar durante cuatro temporadas. Y sí, quizás le haya llegado la hora. ¿Sabéis a quién me refiero, no? The Vampire Diaries enfila su recta final de temporada con un episodio de luces y sombras. ¿Las comentamos?
Partimos de la base que torturar a tu novia para que vuelva a sentir algo, muy humano y correcto no sería. Pero vaaaaale, estamos en Mystic Falls y aquí rigen unas leyes morales algo retorcidas. Así que atas a la mujer de tus sueños a una silla y prometes darle la del pulpo si no le da al interruptor. A Dark Elena, que es más lista que nadie, no se la pueden dar con queso, y sabe que por mucho miedo que quieran meterle, como tiene a los dos hermanos besando el suelo que pisa, lo de la tortura no va a surtir ningún efecto. Tampoco la inmersión mental de Damon parece resultar. Curioso que Dark Elena sea una especie de UberVamp de nivel 80, cuando en realidad debiera ser una de las vampiras neófitas más débiles, y más al estar muerta de hambre. Pero en fin, aún serán capaces de razonarlo diciendo que es la Ultimate Doppelgänger Vamp o algo así. En fin.
Hablábamos en capítulos anteriores de la capacidad de Matt y/o Bonnie para ser esos personajes que siempre aparecen para echar una mano a sus supuestos amigos y sólo reciben hondonadas de hostias a cambio. Bien, Matt Donovan es la quinta esencia del pobre animalico, el único humano sin poderes de la serie, el pringao que tiene los pies en la tierra y tiene que hacer treinta turnos fregando platos en el Grill para poder pagar las facturas. Es el tipo normal que se ve envuelto en una espiral sobrenatural que ni le va ni le viene, si no fuera porque sus amigos y su familia se han visto envueltos en ellos. Es quién nos recuerda que no necesitamos poderes increíbles para salvar al mundo. Es el Xander Harris de una nueva generación. Y como tal, ha sido el único capaz de traer de vuelta a Elena. Ni todos los Salvatore del mundo hubieran sido capaces de encender su humanidad. Ningún ser supernatural lo habría conseguido. Ni Care, ni Bonnie, ni Katherine ni nadie. Es como si un león intentase explicarle a otro cómo ser una coliflor. Y aunque su pequeño emo-discurso parece no haber funcionado, sí lo ha hecho su (falsa) muerte. Y es que recordemos que Elena dio su vida por él en Wickery Bridge. Matt era lo único que podía golpear con suficiente fuerza a DarkWillow Dark Elena. Perder su última conexión con la humanidad, aceptar que no solo su familia estaba muerta por su culpa, sino su primer amor también. Damon ha sabido utilizar el anillo de John, Alaric, Jeremy de manera sublime. Menos utilizar la fuerza bruta, más usar el cerebro, por favor.
Bonnie parece que va por libre, ya que nadie se muestra demasiado interesado por que Silas desate el infierno en la tierra. Así que la más poderosa de las brujas, se reúne en secreto con Katerina para pedirle la tombstone. A cambio, le promete algo que no podrá rechazar. Y es que aunque Bonnie le haya prometido a Silas romper el sello de los mundos, es obvio que prepara algún tipo de plan contra el Inmortal. Katherine, la culpable de todos los males de Elena, va a necesitar los poderes de Silas si quiere escapar de Mystic Falls. Porque aunque la muerte de Matt le haya devuelto la humanidad a la única superviviente de los Gilbert, la razón para no desmoronarse por todo lo que ha hecho siendo Dark Elena es el odio hacia Katherine. Será interesante ver la opinión y la participación de los Salvatore en ese tema desde ya espinoso.
También hemos tenido ración de rubias, con Caroline dejando claro que sigue siendo una freak del control y flipando al descubrir que Matt va atrasadillo con el italiano. Decir que a estas alturas Care siga más preocupada de su graduación que de una amenaza real como Silas, me parece ridículo. Rebekah hace acto de presencia para seguir con su proyecto de ciencias: Matt. Le quiere ayudar a graduarse, darle las oportunidades que no tiene por ser un simple mortal trabajador. La cosa tiene narices. Que se lo lleve a Nueva Orleans y le ponga un piso. Caroline mientras tanto, recibe la visita sorpresa de Silas disfrazado de Klaus que amenaza a Barbie Vamp con matar a su madre si no encuentra a Bonnie. Ha sido el momento slasher del episodio. La rubia ha llegado a su casa para descubrir a su madre aparentemente muerta. Bonnie promete a Silas que hará el hechizo. Sólo falta ver qué as se está guardando en la manga la Reina del baile.
Sigo pensando que a ésta temporada le falta chicha. O nos sorprenden sobremanera con los dos capítulos finales, o pensaré que han estado mareando la perdiz sin tener el valor suficiente para acabar lo que empezaron en la finale de la temporada pasada. Convertir a Elena en vampiro fue un paso valiente y necesario para la evolución de los personajes y de la serie. Que dejase a Stefan también lo fue. Pero toda la trama del sire bond fue un error mayúsculo que no hay por dónde cogerlo y que medio fandom desprecia, así como la idea de la Cura para Elena. No digo que esté todo el pescado vendido todavía, ya que en TVD son del giro de tuerca fácil, pero recalco que de momento, esta temporada ha sido bastante irregular. Cierto es que el último año de instituto siempre es difícil y confuso. Deben tomarse muchas decisiones difíciles que marcarán nuestro futuro. Muchas decisiones que han brillado por su ausencia de momento. Parece ser que habrá que esperar que los muertos caminen y que algunos se gradúen para descubrir el futuro de la chavalería de Mystic Falls.
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Perlas:
- Dark Elena se autoachicharra al sol. (Algún fan ha saltado de alegría y todo.)
- Rebekah trae un tupper de macarrones para Matt.
- Caroline le rompe el cuello a Dark Elena.
- En Pulp Fiction, al menos le abrían la camisa antes de inyectarle en el corazón. (Vamos, no era necesario ver carne, pero un poquito de por favor ahí.)
- Katherine deja que Dark Elena escape. (Para que luego digan que no tiene su corasonsito.)
- “Don’t Damon me.”
- Las caras de los Salvatore (oh, shit!) al saber que Elena quiere matar a Katherine.